Artículos
Sección: Costa
Rica
Publicado: 1998
Situación
Del Acceso A Medicamentos De Los Privados De Libertad Que Viven
Con Vih/Sida
Asociación Costarricense de Personas Viviendo con VIH/SIDA
El presente reporte es presentado por el Sr. Richard Stern, Ph.D.,
Psicologo y el Sr. Guillermo Murillo, Presidente de la Asociación
Costarricense de Personas Viviendo con VIH/SIDA.
Stern y Murillo fueron notificados en agosto de 1998 indicandolos las
personas privadas de libertad que viven con VIH/SIDA en La Reforma, no
estaban recibiendo los medicamentos antirretrovirales, pese a que hay un
fallo de la Sala Constitucional del 23 setiembre de 1997, que determinó el
derecho que tenían todas las personas en estado delicado a recibirlos.
Stern y Murillo realizaron una serie de entrevistas con diferentes personas
del sistema de Salud y del sistema de adaptación social y este es el resultado.
Investigación:
Después de una conversación informal con la clínica del SIDA del Hospital
México, el día 27 de agosto, de una cita con el Director de Adaptación
Social, Sr. Guillermo Arroyo el 9 de setiembre, con el jefe médico de
adaptación Social, el Dr. Luis Eduardo Mejías el 14 de setiembre y con el
Dr. Mario Garita y la Dra. Alfaro de la clínica de La Reforma el 7 de
Octubre, con quienes conversamos ampliamente para conocer las razones por
las cuales los privados de libertad que viven con VIH/SIDA no están
recibiedo los medicamentos antirretrovirales; hemos encontrado lo siguiente:
1) Hasta el momento, después de un año de la decisión de la Sala
Constitucional de que los costarricenses con una situación clínica delicada
a causa del VIH/SIDA, debían recibir la terapia antirretroviral, los
privados de libertad que se encuentran bajo esta categoría no los han recibido.
2) Según el Dr. Garita y la Dr. Alfaro de la Clínica de la Reforma, muy
pronto el primer privado de libertad recibirá estos medicamentos y estará en
un pabellón durante aproximadamente un mes, para que pueda recibir
supervisión adecuada sobre el uso de estos medicamentos y tener una dieta
adecuada.
3) Hay alrededor de 30 casos diagnosticados de VIH en La Reforma, de ellos
cuatro personas ya presentan un cuadro clínico que requieren ser tratados
con los antirretrovirales, de acuerdo al protocolo de la Caja Costarricense
de Seguro Social.
4) La demora en la entrega de estos medicamentos, según el personal de
salud, ocurre
porque las condiciones no son óptimas para entregarlos en el sistema de
adaptación social.
Los inconvenientes que presentan son:
¨ La Reforma no tiene personal de enfermería trabajando en este lugar
después de las 10:00 p.m., esto dificulta que los privados de libertad
puedan recibir medicamentos durante la noche.
¨ La Reforma no tiene personal de enfermería, los sábados, domingos y
feriados, esto también dificulta la entrega de medicamentos estos días.
¨ Hay ciertos requisitos alimenticios para las personas que toman
medicamentos antirretrovirales, por ejemplo, deben ingerir ciertos tipos de
alimentos antes o después de cada dosis.
¨ Algunos privados de libertad son sociópatas y tratarían de vender estos
medicamentos a otras personas, o bien sus compañeros se los robarían para
tratar de vendérlos.
¨ Durante requisas rutinarias, el personal de seguridad decomisaría estos
medicamentos a los privados de libertad.
¨ Otros privados de libertad podrían robar estos medicamentos pensando que
sirven para drogarse.
¨ Los privados de libertad no pueden recibir estos medicamentos hasta que no
se tengan los resultados de exámenes de laboratorio tales como el de conteo
de linfocitos CD4 y de Carga Viral, sin embargo estos resultados pueden
atrasarse por múltiples razones.
¨ Los privados de libertad deben recibir una evaluación sicológica y de
trabajo social antes de recibir estos medicamentos y estas evaluaciones
también sufren grandes demoras.
¨ Los privados de libertad que necesitan ser trasladados al Hospital México
para sus citas médicas, pueden perderlas si, en La reforma se presentan
casos de traslados de personas heridas en riñas u otras situaciones parecidas.
¨ En general el personal médico de La Reforma, no ha podido entregar estos
medicamentos, porque los responsables de la supervisión y entrega de estos
medicamentos están preocupados ante las condiciones antes descritas. El
personal médico del Hospital México indica que ellos también se sienten
preocupados ante la posibilidad de prescribir estos medicamentos, cuando las
condiciones de La Reforma no son adecuadas para que los privados de libertad
los tomen.
Conclusiones.
1) Se entiende que estos medicamentos son muy caros y que la meta de todas
las partes es que estos medicamentos deben ser dados bajo condiciones que
den un máximo de probabilidad de que los privados de libertad van a tener
una buena adherencia y por lo tanto excelentes resultados.
No parece justo o que sea la mejor práctica médica no dar a los privados de
libertad el derecho a recibir estos medicamentos porque las condiciones no
sean "óptimas". Las condiciones no son "óptimas" para la mayoría de
ciudadanos y ciudadanas costarricenses que están tomando esta triterapia y
sin embargo si la están recibiendo. Las personas que viven con VIH/SIDA que
toman estos medicamentos se enfrentan a una serie de circunstancias muy
variables entre cada uno que tienen que solucionar por sí mismos.
La mejor práctica indica que a la persona se le debe educar sobre el buen
uso de estos medicamentos y así pueda sumir su propia responsabilidad en el
proceso, pero debe dársele la oportunidad de probar y probarse a sí mismo de
que es capaz de hacerlo. Por supuesto de manera oportuna. El que un año
después de que se empezaran a dar estos medicamentos y que los privados de
libertad no hayan comenzado a recibirlos, debe ser motivo de reflexión y
búsqueda de soluciones inmediatas.
2) Sin embargo, todo parece indicar que los derechos de los privados de
libertad para recibir estos medicamentos, de acuerdo a la decisión de la
Sala Constitucional, están siendo negados por razones burocráticas o
situaciones hipotéticas que se podrían presentar. Varios privados de
libertad han muerto este año a causa del SIDA, por lo menos cuatro de
acuerdo a los médicos de La Reforma y no es correcto continuar negándoles el
derecho a recibirlos antes de que sea demasiado tarde.
3) No es justo que los privados de libertad tengan que esperar tanto tiempo
para recibir sus medicamentos porque los resultados de los exámenes
confirmatorios y/o los exámenes que determinan si el conteo de linfocitos
CD4 o el de carga viral los hace acreedores a la terapia antirretroviral.
4) Parece injusto que se les haya negado medicamentos a los privados de
libertad porque el horario de enfermería no cubre las 24 horas del día. El
que haya 3 ó 4 enfermeras, pero que ninguna trabaje después de las 10:00
p.m. o fines de semana, no parece ser la mejor opción para ninguno de los
privados de libertad de este centro penitenciario. Tampoco debe ser usado
como base para negar el derecho de los privados de libertad que viven con
VIH/SIDA a recibir sus medicamentos. ¿ Por qué a los privados de libertad
no se les da los medicamentos los viernes, para que los tomen por sí mismos
durante el fin de semana?, por supuesto que se necesita más personal de
enfermería que cubra estos horarios y se deben hacer las gestiones
necesarias para encontrar el presupuesto para cubrir esta necesidad o bien
readecuar el horario del personal de enfermería.
5) En La Reforma los privados de libertad tienen actitudes hostiles contra
los compañeros que saben o sospechan pueden tener VIH/SIDA, esta es una de
las razones por las que la mayoría de privados de libertad, aunque hayan
tenido prácticas sexuales de alto riesgo, no se hacen la prueba de detección
de anticuerpos. Para qué hacerse una prueba para saber si son VIH+, si de
todas maneras no hay medicamentos o buenas condiciones médicas para ellos y
además van a ser blanco del rechazo entre sus compañeros. Si vieran que los
compañeros que viven con VIH/SIDA están tomando medicamentos que les
garantiza una mejor calidad de vida, esto sería un buen incentivo para que
se realizaran voluntariamente la prueba y saber cuáles son sus condiciones
de salud.
6) En general los argumentos hechos sobre el posible comportamiento de los
privados de libertad los cuales predicen resultados negativos, son
discriminatorios si no hay una evidencia que los apoye.
Podría haber algunos privados de libertad que presenten características
sicosociales que no les permita adherirse bien a este tratamiento, pero en
la mayoría de los casos estas situaciones pueden ser resueltas por medio de
supervisión, educación y apoyo antes de comenzar a dar estos tratamientos.
Pero a cada privado de libertad se le debe dar la oportunidad de demostrar
si su comportamiento se adecua o no a la complejidad de seguir este
tratamiento.
Parece completamente injusto asumir que una persona que está consiente de
que tiene una enfermedad mortal no va a responder favorablemente ante la
oportunidad de tomar un tratamiento que podría salvarle su vida o que va a
responder igual a como a respondido con otros tratamientos que los vendía o
regalaba. En otras ocasiones hemos visto como personas, del más variado
tipo de personalidades, se han adecuado excelentemente al tratamiento de
antirretrovirales, por supuesto que también ha habido algunas excepciones.
7) Obviamente el argumento de que los medicamentos antirretrovirales pueden
ser confiscados durante las requisas rutinarias por los agentes de
seguridad, es inaceptable. Si un privado de libertad recibe estos
medicamentos, se le daría también un carné o carta donde demuestre que es
"legal" tenerlos, además de una capacitación a los agentes de seguridad para
que sepan distinguirlos.
8) Dadas las condiciones que se requieren, apoyamos la idea de que todos los
privados de libertad adultos, masculinos con VIH/SIDA sean recluidos en la
Reforma, por ser este centro penal el que mejor infraestructura tiene para
dar seguimiento al tratamiento.
9) Debe haber mejores mecanismos para agilizar los trámites para que una
persona en su etapa terminal, pueda ser trasladado a su casa o albergue,
según lo establece la ley.
10) Existe un gran vacío de información y de capacitación sobre SIDA, tanto
dentro del personal administrativo, personal de seguridad y población penal
en general.
11) Se debe evaluar las condiciones en que se encuentran las mujeres
privadas de libertad y los menores privados de libertad en los otros centros
de adaptación social y tomar medidas urgentes para garantizar que esta
población también reciba la atención
édica y los medicamentos adecuados.
12) En general el concepto de "mejor práctica" indica que es importante
asegurarse de que existan buenas condiciones que aseguren que estos
medicamentos van a ser bien usados. Pero no puede ser aceptado que haya un
atraso de un año mientras se espera a que estas condiciones mejoren. Desde
la decisión de la Sala Constitucional más de 350 personas han tomado este
tratamiento de la Caja Costarricense de Seguro Social y no todos están
tomándolos en iguales condiciones y tampoco tienen comportamientos o
personalidades iguales. No es justo que una clase de personas, los privados
de libertad que viven con VIH/SIDA, se vean privados del derecho a la salud
durante tanto tiempo, porque las condiciones óptimas no son posibles.
Nota:
Este reporte no pretende menospreciar el trabajo que realizan varias
personas de las clínicas de atención del paciente con SIDA del Hospital
México y de La Reforma, al contrario, sabemos los enormes esfuerzos que
realizan por dar una atención humanitaria y profesional y la serie de
obstáculos que deben enfrentar.
El objetivo de este reporte es concientizar a todas las partes involucradas,
para que la solución de estos problemas se dé de manera oportuna, que no es
admisible la muerte de más personas a causa del VIH/SIDA en las cárceles de
nuestro país. Que todos los costarricenses debemos unir esfuerzos para que
estas situaciones no se sigan dando. Que las autoridades de salud y de
adaptación social deben asumir una actitud más responsable en cuanto a la
salud de los privados de libertad que viven con VIH/SIDA.
Richard Stern
Tel: 506-2280-3548
Fax: 506-2280-3548
rastern@sol.racsa.co.cr
Asociación Costarricense de Personas Viviendo con VIH/SIDA
Tel: 506-8433-8522
Fax: 506-2280-3548
memopvs@sol.racsa.co.cr